Córdoba, una joya escondida en la costa Caribe de Colombia, ofrece una variedad de experiencias que capturan la esencia de esta región. Desde sus playas vírgenes hasta sus encantadores pueblos coloniales, es el destino perfecto para quienes buscan una mezcla de aventura, cultura y relajación.
Prepárate para explorar, relajarte y maravillarte con todo lo que Córdoba tiene para ofrecer. A continuación, te presentamos cinco planes imperdibles que no puedes dejar de disfrutar en tu visita a esta hermosa región.
1. Disfrutar de la playa en Moñitos
Moñitos es un pequeño municipio costero que cuenta con algunas de las playas más vírgenes y tranquilas de Colombia. Situado a unos 90 kilómetros al suroeste de Montería, es un destino ideal para quienes buscan escapar del bullicio y relajarse en un entorno natural.
Las playas de este municipio se caracterizan por su arena blanca y aguas cristalinas, perfectas para nadar y practicar deportes acuáticos como el surf y el paddleboard.
Para llegar a Moñitos, puedes tomar un autobús desde Montería, un viaje que dura aproximadamente dos horas. Los alojamientos en la zona varían desde cabañas rústicas frente al mar hasta pequeños hoteles boutique, con precios que oscilan entre 100.000 y 300.000 pesos colombianos por noche.
No te pierdas la oportunidad de degustar mariscos frescos en los restaurantes locales, donde una comida completa puede costar alrededor de 30.000 pesos colombianos.
2. Recorrer Lorica
Lorica, también conocida como Santa Cruz de Lorica, es un encantador pueblo colonial situado a orillas del río Sinú. Con su arquitectura republicana y su vibrante mercado, este lugar ofrece un viaje al pasado y una inmersión en la cultura local.
Pasea por el centro histórico y admira edificios como la Alcaldía y la Catedral de Lorica, que reflejan la rica herencia cultural de la región.
Una visita al mercado de Lorica es imprescindible. Aquí, puedes encontrar una variedad de productos frescos y artesanías locales, incluyendo los famosos sombreros vueltiaos. Los precios en el mercado son bastante variados, con productos locales desde 50.000 y 150.000 pesos colombianos.
Para llegar a Lorica desde Montería, puedes tomar un autobús que te llevará en aproximadamente una hora y media, con un costo de alrededor de 25.000 pesos colombianos.
3. Visitar el Museo Calabazo en San Antero
San Antero es conocido por su rica historia y cultura, siendo el Museo Calabazo uno de los lugares más destacados para explorar. Este sitio alberga montones de artículos artesanales elaborados en calabozo, entre otros materiales.
Entre los objetos expuestos se encuentran cerámicas, ofreciendo una gran variedad para quienes deseen llevar como recuerdo del viaje.
La entrada al museo es gratuita, aunque es recomendable dejar una donación para apoyar a los artesanos locales. Está abierto todos los días de la semana de 7.30 a.m. a 7 p.m.
4. Diversión en Saltillo de Palmira en Tierralta
Para los amantes de la naturaleza y la aventura, Saltillo de Palmira en Tierralta es una parada obligatoria. Este paraje natural, ubicado a unos 60 kilómetros al sur de Montería, es conocido por sus impresionantes cascadas y pozas de agua cristalina.
Es perfecto para nadar, hacer senderismo y disfrutar de un pícnic rodeado de la exuberante vegetación de la selva tropical.
El precio de la entrada varía entre 20.000 y 50.000 pesos colombianos, dependiendo de las actividades que desees realizar. Para llegar, puedes tomar un autobús desde Montería hasta Tierralta y luego un mototaxi, con un costo total de alrededor de 15.000 pesos colombianos por persona.
5. Contemplar atardeceres en Montería
Montería, la capital de Córdoba, no solo es un centro económico y cultural, sino también un lugar perfecto para relajarse y disfrutar de hermosos atardeceres.
Puedes visitar el Parque de la Vida, el Malecón del Río Sinú o simplemente encontrar un espacio en la ciudad para disfrutar del atardecer. La entrada a estos sitios es gratuita y se recomienda llevar una cámara para capturar el momento.
El Parque Lineal Ronda del Sinú, que sigue el curso del río, también es uno de los mejores puntos para contemplar el ocaso. Este parque es un espacio verde que combina áreas de recreación, senderos peatonales y ciclovías, además es hogar de una variedad de fauna, incluyendo monos aulladores y aves exóticas.
La entrada al parque es gratuita y es popular tanto para locales como para turistas. Después de disfrutar del atardecer, puedes dirigirte a uno de los muchos restaurantes a lo largo del río para una cena deliciosa.
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