Aruba no es solo uno de los destinos más hermosos del mundo, rodeado por un mar cálido y cristalino, extensas playas de arena blanca y un clima perfecto durante todo el año. Es mucho más que eso, esta isla atesora una rica cultura, con influencias africanas, europeas y de diversos países de América Latina que integra más de 90 nacionalidades. Además de una exquisita gastronomía, arte y diferentes actividades de aventura.
A continuación, Viajando.Travel presenta las tres opciones para disfrutar en Aruba.
1. Realizar una actividad de aventura
La isla es definitivamente un lugar para ir tierra adentro y conocer el parque Arikok, que ocupa un 20% del territorio insular, con curiosas cuevas, arte rupestre, dunas y formaciones de lava, cuarzo y piedra caliza.
Allí se realizan caminatas guiadas en la naturaleza a través de lechos de ríos secos hasta bahías ocultas como Moro, Boca Prins y Dos Playa. La geografía árida, sembrada de cactus y aloes, también puede recorrerse en vehículos 4X4, bicicleta, caballo, cuatriciclo, segway o Harley Davidson.
El paseo puede llevar hasta alguna cueva, como Guadirikiri, con dos espacios donde se cuela el sol; o Fontein, en cuyo techo hay pictografías de los indios arawak. Un alto en el camino en California permite apreciar las dunas y conocer el antiguo faro. Otras formaciones rocosas son las de Casibari o Ayo, que fueron morada de los antiguos habitantes. Una parada especial merece la piscina natural Cura di Tortuga, alimentada por el mar y formada por piedras volcánicas.
Frente a las actividades acuáticas que tiene la isla, se puede descansar sobre la arena blanca o difrutar de la profundidad de su mar turquesa para hacer esnórquel. Los más experimentados pueden elegir puntos de inmersión más profundos donde se aprecian pulpos, morenas y barracudas.
Así mismo, se pueden practicar actividades como kitesurf, windsurf, tours en velero, pesca, esquí, kayak, entre otros. Para realizar alguno de estos deportes en las playas de Aruba se encuentra una amplia variedad de empresas dedicadas a los deportes acuáticos, que van desde los más dóciles como el paddle hasta los más extremos, como parasailing, surf o skyboard.
2. Degustar de la gastronomía
El viajero puede notar esta influencia en la gastronomía, que vale la pena conocer. A diferencia de otros destinos del Caribe, Aruba tiene pocos hoteles all-inclusive ya que la idea es que los turistas salgan y conozcan la isla, su historia, su cultura y sus más de 200 restaurantes.
Allí, algunas de las especialidades locales son el gouda glaseado del keshiyena, revuelto de pollo con vegetales cuyo toque final es una cubierta de queso; el estofado a base de carne, pollo o pescado que se sirve con arroz o puré de maíz; o el pastechi, un pan dulce relleno con carne o queso.
Las propuestas gastronómicas incluyen también la cocina europea, asiática, sudamericana, africana y caribeña, con una fusión de sabores para todos los gustos, en la que destacan los picantes con toques de curry o picantes de frutas, usados para marinar carne o pescados.
3. Recorrer Oranjestad y visitar San Nicolas
Oranjestad, la capital de Aruba, es conocida por sus coloridas casas con techos neerlandeses, grandes puertas de madera tallada, bellos azulejos y amplias galerías.
La capital de Aruba cuenta con espacios dignos de visitar, como el “stadhuis” –ayuntamiento– pintado de un verde intenso, o el fuerte Zoutman, la edificación más antigua de la isla (1798), que la protegió de piratas y enemigos cuando era el puerto intermedio para el comercio entre Curazao y Venezuela.
El paseo por el centro de la ciudad puede completarse con la visita al Museo Arqueológico, que atesora el legado cultural amerindio de la isla. Otros lugares de interés son el Teatro Nacional de Aruba y el Museo Numismático.
Además, la ciudad tiene un bullicioso puerto donde abundan los comercios, el arte, las artesanías locales y una buena muestra de la gastronomía caribeña. Una original forma de recorrer Oranjestad es en el tranvía que parte desde la terminal de cruceros y circula por la calle principal, deteniéndose en seis puntos de interés turístico.
Por su parte, San Nicolas se encuentra ubicado a 30 minutos en auto de Oranjestad, en el extremo sudeste de la isla, este destino es considerado la capital cultural de Aruba, una pequeña zona que se destaca por tener una importante apuesta artística e histórica, la cual se refleja en diferentes murales.
Uno de los eventos más importantes que reúne este lugar es el feria Aruba Art Fair, en la cual se reúnen artistas locales y del mundo para crear arte callejero. Esta feria combina diferentes formas de arte, como música, danza, moda, gastronomía, entre otras.
Información adicional
- Cómo llegar a Aruba: Copa Airlines, Avianca, American Airlines, Wingo y Delta llegan a la isla con escalas en diversas ciudades. Adicionalmente, Oranjestad dispone de una importante terminal de cruceros.
- Requisitos de ingreso: vacuna contra la fiebre amarilla, Tarjeta Migratoria (ED Card), tiquete de regreso y pasaporte.
- Idioma: holandés, papiamento, inglés y español.
- Moneda: florín arubeño, pero también reciben dólar americano y las tarjetas de crédito.
- Electricidad: 110 voltios (60Htz).
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